Aunque sin victorias, Los Pumas le dijeron adiós al primer Rugby Championship con la frente en alto. Jugando de igual a igual frente a los tres mejores seleccionados del planeta, el elenco argentino demostró estar a la altura de las circunstancias, demostrando considerables avances desde lo táctico y técnico. Uno de los referentes del equipo, como Patricio Albacete, expresó su opinión al respecto. Gabriel Baldi, Tercer Tiempo
Tras caer 25 – 19 frente a los Wallabies, el segunda línea Patricio Albacete dialogó con Tercer Tiempo desde el Gigante de Arroyito. El jugador del Toulouse, dio cuenta de su parecer sobre el certamen que acaba de concluir y su visión en relación a la actualidad del equipo.
-¿Qué análisis hacés de la derrota ante Australia?
-Cometimos innumerables infracciones y lo pagamos caro. Creo que también debemos aprender a jugar mejor con el árbitro. Hay que hacerlo al límite, lo cual a veces puede ser perjudicial y otras nos puede jugar en contra. Estuvo a la vista que hicimos muchos penales lo que realmente nos perjudicó. Puede ser que nos vayamos tristes por no haber conseguido un triunfo en el torneo, pero sabemos que cumplimos el objetivo que teníamos de aprender de los mejores e ir superándonos a cada paso.
-¿Cuál es el balance del primer torneo para Los Pumas?
-Por ser nuestra primera participación en un certamen, el balance es positivo. Nos sentimos muy cómodos en cada test. Desde un principio sabíamos que no iba a ser un torneo fácil, pero considero que hubo mejoras en muchos aspectos del juego. Sabemos que todavía hay varias cosas por mejorar pero lo esencial es que tenemos que estar tranquilos y seguir trabajando. En noviembre tenemos que afrontar la ventana internacional en Europa y me parece que lo haremos con mucha más experiencia.
-¿Creés que se van con alguna deuda pendiente?
-La verdad es que no creo que tengamos deudas con nadie. Creo que acabamos de culminar un torneo espectacular que nos dejó mucha enseñanza en todo sentido, tanto a nivel colectivo como a cada jugador desde lo personal. Puedo decir que me voy muy orgulloso con lo que producimos en este Rugby Championship y más allá de los resultados que hayamos obtenido y de que no pudimos ganar, creo que entregamos el corazón en cada juego y no tenemos nada que reprocharnos. Claro está que en frío, habrá muchas cosas por evaluar, rever y cuestionarnos, pero en líneas generales nos vamos sumamente conformes.
-¿Qué fue lo mejor y lo peor que tuvo Argentina en este certamen?
-Lo mejor que tuvimos puede ser que dimos un paso adelante en la mayoría de las facetas de juego, como por ejemplo en los contraataques, en la obtención, en nuestro juego táctico con el pie, etc., pero creo que estamos por el buen camino. Después, claro que en situación de contacto debemos corregir y muy bien, el juego en el contacto, las posiciones del cuerpo, las carreras, entre otras cosas, lógicamente que debemos avanzar en cuestiones claves y más si se trata que estamos enfrentando a potencias del rugby que no te perdonan nada. A lo mejor frente a otros equipos pasa, pero ante los mejores del mundo no se puede escapar ningún detalle.
Y sin mediar pregunta continúo: “Por ejemplo, en defensa no habíamos fallado en toda la noche hasta que llegó el try. Casos así demuestran que debemos hacer partidos perfectos. Un error cerca de nuestro ingoal es prácticamente un try en contra. Pero, por otro lado creo que los atacamos mucho. No hay que olvidar que por la idiosincrasia del equipo argentino, no jugábamos más que con pelotas recuperadas y hoy por hoy somos un equipo que propone, que ataque partiendo del line, del scrum y de todos lados. Obviamente todavía tenemos que aprender para poder ser mucho más sólidos y precisos.
-¿Considerás que la inclusión de Landajo le dio un valor ofensivo agregado al equipo?
-Creo que sobre todo lo fundamental pasa por la reorganización ofensiva que tengamos. Nicolás Vergallo cuando jugó también le dio al equipo mucha dinámica. Creo que todo pasa por querer e intentar siempre crear situaciones. La clave es que el equipo se anime y creo que en este torneo demostramos que aceitando cosas podemos ir por más.
Foto: Rodolfo Michunovich