«cuclillas-HONESTIDAD-adentro»

Bien podría indicar sugestivamente la nueva secuencia de entrada, recientemente vuelta a retocar. 

Otra vez cambios en esta formación, y van…

Da para pensar y sin dudas que es una formación ‘difícil’ para todo: para enseñarla y aprenderla sobre todo, pero también para juzgarla o analizarla. Y hay muchísima fuerza en juego (y por ende conlleva su riesgo físico) y de allí que debe ser monitoreada y fiscalizada de cerca, tanto en los entrenamientos, en la cancha, como en el escritorio o pizarrón.

Pero, cuántos parches más le cabrán a esta cámara?

Más allá de lo técnico, de lo físico y del factor actitudinal, de que se afirma que un primera línea llega a su madurez después de los 30, después de muchas horas de entrenamiento duro y específico, insisto en que lo primordial, siempre va a ser la honestidad, los valores y los principios bien asimilados, transmitidos y puestos en práctica. De otro modo pasarán los años y el galgo seguirá sin alcanzar la liebre.

Es tal vez el aspecto o situación del juego, visto del otro lado, el de la trampa, el de la ‘viveza’ tan mal entendida y desgraciadamente hasta promovida por algunos que cualquier des-calificativo les queda corto, en la cual se pueda ‘disimular’ más, mentir más, o hacer creer o parecer otra cosa (al referee y a muchos más), si se tiene bien ‘de-zorro-llado’ este tipo de argucias, de falsas técnicas, de mal habidas ‘pericias’ (siendo generosísimo en la ponderación), en fin, espero se entienda. Nada tan alejado del verdadero espíritu de rugby, que pobre, no dejemos que se nos vaya al fondo del placard.

Acá hay años de mucho sacrificio, de mucha entrega, de mucha humildad (el de pilar justamente es un un puesto al que se lo vincula mucho con esta virtud). De mucho interés y dedicación en perfeccionar la técnica, aprender de los que más saben y así y todo siempre habrá amasadora y práctica de scrum. Claro, si nos empecinamos en querer tener un super pilar que llegue a la punta y pegue el tackle salvador al wing que ya finteó a tres y que participe casi como un tercera línea del juego suelto, y sí, es obvio, que va a ser a expensas de empujar menos en el scrum. Y es impactante ver eso, llama la atención por su puesto y hasta hace unos años era un ilógico de este deporte. Pero hoy no, la pregunta es a costa de qué. Por ahora, en detrimento del scrum. De ahí que se le busque tanto la vuelta y se trate de justificar todo como medidas de seguridad, fluidez del juego, etc. En todo caso también otro tipo de intereses que no sé si miran o defienden tanto la esencia del juego, aquello hoy plasmado, bien al comienzo, precisamente en el apartado Principios del Juego (Documento del Juego).

No es que un pilar se tenga que limitar a empujar nada más, pero sí es y será su principal función, y si logra porque se hace tiempo y puede dedicarle muchas horas a esto, además participar de otras facetas del juego sin descuidar lo fundamental, bienvenido sea (muy difícil y subjetivo dicho sea de paso).

El scrum es parte del juego del rugby desde que se inventó y se formuló su respectivo reglamento. Y lo gana el que más empuja, el que más técnica individual y de grupo tiene y el que más huevo le pone. Es emblema, es bandera. Y afecta más directamente o indirectamente a la cabeza del equipo y del rival también. Nos parece que a semejante fórmula porque venga alguno o algunos con ‘armas’ poco nobles, tengamos que llegar a nivelar tan para abajo(con la inexplicable injusticia de la ‘tolerancia’ de la hechada torcida a la cabeza)? Ya han pasado varios siglos y todavía no encontramos el agujero del mate?. Les refresco: ser honestos, sinceros, tener valores. Y si entraste mal, no te podés acomodar, etc., etc (las mil excusas ‘mañosas’), o el de enfrente es superior simplemente en este aspecto (y casi siempre la muda causa de cuando esto sucede), justamente, con todo esto te estás enterando que estás jugando o practicando un deporte increíble, que te forma en la vida, solo hay que saber sobrellevarlo y de ese partido vas a salir con más ganas de entrenarte, de aprender más, de superarte y así y todo el otro quizás siga siendo ‘mejor’ toda la vida, y? eso que cambia? Va a justificar que derrumbes o colapses el scrum de nuevo la próxima vez (con todo el riesgo que ello implica)? Crees que tus compañeros o amigos reconocerán esto como una virtud, como un gesto de ‘esos’ que te une para toda la vida!, como suele suceder con tantísimas otras cosas lindas que tiene esto?. No, es que ser pilar….Basta de exacerbar el tema! Sí, el pilar quiere ganarle su lucha al de enfrente, que en rigor de verdad tampoco es tan tan así (‘comparte’ un hombro con un compañero o le queda un hombro libre según el puesto……No es un mano a mano ‘puro’ tampoco). Y para el hooker, que queda al medio, y también empuja mucho, su misión es más bien técnica y de coordinación de todo el pack, es principal responsable y comandante de lo que sucede ahí adentro. De todas maneras nada justifica una deslealtad!

Después nos enfocamos ensañadamente contra el referee que tiene en el scrum, también un partido aparte. En donde casi siempre que cobre penal o free kick por lo menos alguien le va a decir algo. Si no cobra nada porque no cobra nada. Y que no vaya a ser cosa que sancione con tarjeta amarilla o expulsión a uno o más jugadores por juego desleal (que podría perfectamente hacer uso de sus facultades al respecto por otro lado) porque se le viene un huracán verbórragico de reclamos y críticas.

El rugby habla de límites, habla de pregonar con el ejemplo, invita a cooperar con el referee (tal vez sea el scrum en donde más se le deba esto), fomenta el levantarse una y mil veces (y de hasta ayudar a que se levante el rival), de aprender a ganar y también a perder. Sepamos decodificar el mensaje!

Gracias y hasta la próxima

Por Mariano Lemoine, desde Mendoza, especial para Tercer Tiempo 

Opinión

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