El profesor Hernán Bonarrigo, especialista en preparación física de deportes individuales y de conjunto, de dilatada trayectoria a nivel local, regional e internacional continúa en Tercer Tiempo con su ciclo de columnas específicas exclusivas. Imperdibles y enriquecedores aportes por parte del educador paranaense.

Los que somos profesores de educación física sabemos que la actividad física ayuda a prevenir y tratar enfermedades; es así que su mayor y más relevante valor es la prevención de ellas. Nosotros, como agentes de salud, debemos promover, permanentemente, la práctica de la actividad física cotidiana en la población, ya que es la medicación más económica y placentera que existe. Por su parte, el sedentarismo es un factor de riesgo que atenta contra la salud y la filogénesis del hombre.

“El movimiento existe desde antes de la vida”. Pasemos a explicar esta frase, que puede sonar contradictoria. Según las ciencias médicas, la vida se produce cuando el óvulo fecundado por el espermatozoide se implanta (adhiere) a la pared del útero materno. Pero, ¿cómo cree que ese óvulo y espermatozoide se encontraron e hicieron contacto físico? Ni más ni menos que a través del movimiento. Por lo tanto, el ser humano tiene al movimiento como una de sus más puras y antiguas expresiones filogenéticas, que existe desde las más remotas épocas de nuestra especie. La expresión del movimiento es tan propia de la vida que se puede considerar no dependiente de ella: existe antes de la vida misma.

Entonces, nos preguntamos ¿qué cosa rara nos está pasando a los seres humanos, en la sociedad actual, que queremos ir en contra de nuestro mensaje filogenético? Los avances tecnológicos apuntan a simplificar la vida cotidiana del hombre, promoviendo el sedentarismo y la falta de actividades intelectuales y creativas. Hoy en día nos estamos convirtiendo en operadores de programas creados por y para nosotros mismos. La mayor carga semanal de actividad física la tienen nuestros dedos pulgares e índices, ellos son los encargados de tipear mensajes en los  smartphones, tablets, o de apretar el botón del mouse. La tecnología bien empleada es muy buena, pero su incorrecto uso aumenta las posibilidades de ser sedentarios, lo que conlleva mayores probabilidades de padecer un episodio cardíaco.

En la ciudad de Paraná, 7 de cada 10 estudiantes secundarios son sedentarios, es decir, practican menos de tres veces por semana actividad física, de acuerdo con una encuesta realizada a 5.000 alumnos de nivel medio pertenecientes a escuelas públicas de Paraná y Paraná Campaña, y llevada a cabo por docentes de educación física con el tratamiento estadístico de la Subsecretaria de Estadística y Censo de la Provincia en el año 2009. Esto aumenta, significativamente, las posibilidades de incrementar el gasto público en materia de salud dentro de unos 15 o 20 años, debido a que existen grandes probabilidades de que aquellos adolescentes del 2009 sigan siendo sedentarios cuando sean adultos.

Si luego de leer este artículo, desea comenzar a realizar actividad física en los próximos días, tendrá la oportunidad de dejar de estar dentro de las estadísticas del sedentarismo, aumentando los registros de la población activa. Nunca es tarde para empezar a moverse, y cada vez son mayores las ofertas recreativas en nuestra ciudad para escapar del sedentarismo: deportes tradicionales; grupos de caminatas en alguna plaza de la ciudad, de ciclistas, de corredores; juntadas con los amigos para jugar un futbol 5; paddle; clases de ritmos latinos, tango, folclore, danzas tradicionales de diversas colectividades; hacer tela; slack; pasear en rollers; etc.

Es muy importante que si usted es sedentario comience a practicar alguna actividad física lo antes posible, sin embargo, hay que ser cuidadoso a la hora de elegir qué hacer. Así como cuando compra ropa, modas y servicios, al consumir actividad física también está comprando una idea. Cuando adquiere buena verdura en el mercado, también existe la posibilidad de que le vendan “cualquier verdura “, y no todo lo que se ofrece en los gimnasios lo puede consumir cualquier público. En síntesis, el ejercicio puede ser tan bueno como nocivo para su salud, por ello, es que se deben considerar algunas cuestiones.

En el rubro de los gimnasios, lamentablemente, cada vez se observa más que aparecen nuevos tipos de “verdura” en venta. Hoy en día, una “verdura” muy de moda es el CrossFit,  HIT , entrenamiento de alta intensidad o algún otro tipo de denominación comercial que se le quiera atribuir. Generalmente, en esta actividad, participan alumnos que recién comienzan un gimnasio,  o que asisten a un gimnasio hace un tiempo o que practican alguna actividad física extra ,e incluso algunos son deportistas.

El crossfit es una actividad que consiste en realizar una serie de ejercicios hasta un nivel de fatiga extrema o casi extrema.Estos ejercicios, como todo ejercicio tienen una técnica de ejecución y es determinante esta técnica para tener un rendimiento adecuado en el crossfit y por sobre todas las cosas “disminuir” el riesgo de una lesión musculo/tendinosa o problema de salud mas grave, que es la observacion principal  de este articulo .

En el cross fit los valores de ácido láctico en sangre superan, fácilmente, los 12 mil/mol/lit. Para tener una idea más concreta de lo expuesto, haremos una comparación:
Cualquier practicante de CrossFit aumenta sus valores de ácido láctico tanto o más que un jugador de seven de rugby durante un partido. Estos valores de ácido láctico de 12 mil/mol/lit son el promedio de jugadores de rugby en especialidad seven (según el estudio hecho en el seleccionado tucumano en el año 2001), con la gran diferencia de que estos jugadores de rugby estudiados están debidamente adaptados, entrenados, nutridos y suplementados a lo largo de años para poder soportar tanto esos niveles de ácido láctico en su organismo como las respetivas destrucciones de tejido muscular que las condiciones de ejercicios de alta intensidad producen. El sentido común, el menos común de los sentidos, indica que una persona con poco tiempo de entrenamiento está lejos de poder soportar exponerse a esos elevados niveles de exigencia fisiológica, ya sean similares o superiores, obviando el contacto y desgaste físico que implica jugar un partido de rugby.

Pues, es probable que un alto porcentaje de los practicantes de CrossFit, en estas latitudes, sean personas de bajo nivel de condición física. Leyendo esto, puede decir: “Por eso debo hacer CrossFit, para mejorar mi condición física”… Y, estimado lector, es todo lo contrario, debe estar muy bien entrenado para poder hacerlo. Esta actividad no es un medio de entrenamiento para aumentar su nivel de condición física, si la misma es de bajo nivel. Esta actividad es para llevar, física y mentalmente, a altos niveles de resistencia extrema a aquellas persona que ya tienen un cierto nivel de condición física.

¿Y que significa tener un “cierto nivel de condición física”? básicamente significa tener incorporado a nivel cortical (cerebro) los patrones de movimiento que se usan en crossfit, técnica de levantamientos olímpicos , saltos, variación de posición del centro de gravedad,traccionar, empujar ,golpear ,etc.Ademàs de las adaptaciones enzimáticas, neuronales, musculares , y tendinosas que se consiguen a través de muchos años de entrenamiento en las edades adecuadas.

Quien suscribe opina que una actividad de altísima intensidad, como es el CrossFit, no puede ser practicada por cualquier mamífero bípedo de la especie humana, sin una larga trayectoria de años de entrenamiento y adaptaciones enzimáticas, celulares, nerviosas y hormonales. También, lo que ha expresado su creador Greg Glasmann, el CrossFit no es para cualquiera y “puede matar”.

Referencias:

1) El creador de CrossFit reconoció en el New York Times en 2005 que este ejercicio “te puede matar” y que él siempre fue honesto al respecto. Si bien muchos de los gimnasios y entrenadores plantean que “es para cualquiera”, los expertos dicen que se requiere necesariamente entrenamiento físico previo por los altos niveles de exigencia que tiene. (Planodeportivo.com  20/7/14 ,  rouge-perfil.com 29/7/14,  unosantafe.com.ar Secc.Informaciòn General 29/7/14)

2) Al lector que le interesa el tema puede ahondar más buscando información sobre episodios cardíacos y rabdomiolisis inducidos por entrenamientos de alta intensidad y por el esfuerzo en las fuerzas armadas y fuerzas de seguridad de los Estados Unidos.

(Cita en PubliCE StandardTracy J Brudvig y Patricia I Fitzgerald (2007). Identificación de los Signos y Síntomas de Rabdomiolisis Aguda por Esfuerzo en Atletas: Un Guía para los Profesionales del Ejercicio. http://g-se.com/es/fisiologia-del-ejercicio/articulos/identificacion-de-los-signos-y-sintomas-de-rabdomiolisis-aguda-por-esfuerzo-en-atletas-un-guia-para-los-profesionales-del-ejercicio-1057 y sus referencias bibliograficas)

La más pura y genuina opinión profesional que merece este tema es que no está bien promover la práctica de este tipo de actividades en cualquier persona. Los profesores y encargados de gimnasios debemos ser muy cautos de lo que pasa dentro de nuestro lugar de trabajo. Cada uno está en su derecho de hacer lo que crea conveniente en su negocio, pero no debemos olvidarnos  que una gran parte de los usuarios de gimnasios de Paranà y ,me aventuro a decir ,de toda la Argentina son gente común y corriente, no son deportistas, altamente, entrenados ni adaptados.

En otras palabras, si se prioriza la moda y la captación de clientes antes que el entrenamiento, desembocamos en el mismo lugar de siempre:En un mercado donde se vende cualquier “verdura”, total la gente va al gimnasio, transpira, se entretiene y paga la cuota.

Los entrenadores, que dignificamos la profesión con las medallas que nuestros atletas obtienen, no entretenemos a la gente.

Los entrenadores entrenamos a la gente, de esa manera la gente se entretiene.

Cualquier “seudoentrenador” con un curso de 1 año  puede entretener a la gente,  pero no cualquiera puede ser entrenador.

Esa es la diferencia entre “entrenar” y “entretener”…