El seleccionado nacional derrotó a su par anfitrión este martes en el comienzo del Mundial Juvenil. Los Pumitas, con la presencia del entrerriano Marcos Kremer, vencieron por 37-26 al local.
El resultado vino sobre todo, tras un primer tiempo en el que la eficiencia con las manos en ataque, al jugar en terreno rival y concretar las ocasiones que generaron. Dominio territorial y de pelota, buenas carreras y solidez en las formaciones fijas, esos primeros cuarenta minutos fueron contundentes para los chicos argentinos, tanto como para el pateador georgiano que, con suma precisión y potencia, se las ingenió para, a pesar de la diferencia en el juego y en tries (3 a 0 para Pumitas), mantener a su seleccionado cerca en el marcador.
En el segundo parcial y a pesar de contar con mucho viento a favor, Los Pumitas debieron sufrir el asedio y embate de un pack georgiano muy potente, grandote y poderoso que sin brillo, pero con muchas ganas, se fue a buscar quebrar la defensa argentina a pura agresividad. Tanto fue el conjunto local que consiguió su try -sería el primero de dos- pero el pie de Albornoz, complicado por el viento en la primera parte, aportó puntos vitales para mantener a los georgianos a raya.
Producto de avances quirúrgicos en esa segunda parte y cuando Georgia quiso aprovechar el poder de sus delanteros, Los Pumitas anotaron de nuevo en seis minutos y con esos dos tries se puso 37-26 a falta de apenas diez por jugar. Ese sería el score final, porque si bien el conjunto local volvió a intentar llevarse por delante a Los Pumitas con sus delanteros, jugando directo, los chicos argentinos defendieron con bravura y determinación un resultado que los deja punteros de la zona con 5 unidades y a la espera de Francia, que empató con los Junior Springboks en 23 en el primer partido de esta Zona C.
El domingo desde las 6 y también con TV en directo de ESPN3, se verá el segundo partido de los argentinos en esta competición, cuando enfrenten a Francia en el mismo Avchala Stadium de Tbilisi.