Pasó con éxito por Santa Fe y Rosario el Mundial Juvenil. Con el certamen se fueron numerosas imágenes captadas por Gero Uranga, para Tercer Tiempo. En la selección de sus mejores fotos, el propio fotógrafo paranaense expresó sus sensaciones.
«Cuando me pidieron que mande mis 10 mejores fotos, me puse a pensar que tipo de fotos elegir. Como fotógrafo de Rugby, uno siempre trata de congelar la acción, que haya contacto, golpe, que la pelota este visible, que el pasto suelto y las gotas de transpiración estén flotando; y si también hay jugadores suspendidos en el aire… ¡Mejor! El Rugby es un deporte de contacto y hay que transmitir eso con las imágenes.
Para congelar hay que laburar con velocidades de disparo altas, la apertura del diafragma lo más abierto posible, y jugar con el ISO para que la foto salga bien expuesta.
Uno de antemano sabía que los jugadores en el mundial prácticamente son profesionales, eso ayuda muchísimo a la fotografía, se ve en los físicos, en los golpes, en el tiempo de suspensión, en cada corrida y en cada tackle.
Para destacar todo este tipo de cosas es fundamental la perspectiva y el horizonte; el horizonte siempre está a la altura de los ojos (lente), mientras más cerca del piso este, más se va a notar la suspensión de los jugadores; los mismos van a parecer más imponentes, como que se te vienen encima. Generalmente uso el lente a unos 60 cm del suelo (sentado en el pasto).
Por otro lado en los mundiales siempre hay un ambiente distinto, un marco imponente, además de diferentes culturas, diferentes expresiones y sentimientos; detalles y momentos que también hacen a la fotografía deportiva. Eso uno lo va descubriendo estando atento y preparado para captar cada momento.
Con mis diez fotos intento mostrar lo que busqué y lo que descubrí…»
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